Los seres de Luz son nuestro linaje de “medicina”. Son seres humanos que han alcanzado el nivel de Ángeles.
Algunos habitan cuerpos, otros están en forma de
espíritu, pero todos tienen el mandato de proteger a aquellos que buscan el
bien estar del planeta.
Los budistas les llaman Bodhisattvas y son los mejores
aliados espirituales que alguien puede tener. Nos proveen de sabiduría sobre
cómo convertirnos en ángeles nosotros mismos.
Esto es a lo que las profecías de
los Laikas se refieren cuando nos dicen que tenemos el potencial de
convertirnos en Homo Luminous. Nosotros podemos desarrollar campos energéticos
luminosos de ángeles en vida. El Munay-Ki nos ofrece las llaves energéticas
para hacerlo.
Cuando evolucionamos a Homo luminous, ya no necesitamos llamar a los Ángeles y Arcángeles para que nos ayuden a encontrar un lugar de estacionamiento, o
fortunas, porque nosotros nos estamos convirtiendo en ellos.
Conforme nos convertimos en Guardianes de la Tierra, alcanzamos el rango de los Ángeles, quienes vienen de muchos y muy diferentes mundos y quienes fueron las
almas originales, presentes después de la Creación.
Ellos no pasan por ciclos a
través de cuerpos como nosotros, porque no necesitan una forma física-corpórea,
así como no necesitan aprender y crecer a través de una existencia en el mundo
material. Tienen vida eterna y son los guardianes de muchos mundos en muchas
galaxias.